Vicente del Bosque, quince años después: «El fútbol es para ser feliz»
THE OBJECTIVE revive con el entrenador nacional la gesta del Mundial de Sudáfrica 15 años después
Con motivo del 15 aniversario de la histórica victoria de España en el Mundial de Fútbol de Sudáfríca 2010, en THE OBJECTIVE hemos conversado en exclusiva con Vicente del Bosque, el líder tranquilo que guió a la selección española hacia su mayor gesta.
Esta entrevista exclusiva, que se pudo realizar junto al trofeo de la Copa del Mundo gracias a que la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) nos abrió las puertas de un Museo del Fútbol Español que cambiará de ubicación en próximas fechas para acercarlo más al aficionado, repasa el torneo partido a partido, destacando las referencias de Del Bosque a los jugadores clave de aquella generación, con una referencia especial en sus comentarios sobre Xabi Alonso al que califica como un «entrenador en el campo».
Una herencia de éxito
Antes de sumergirnos en los partidos, Del Bosque recuerda la herencia recibida de Luis Aragonés, quien llevó a España a ganar la Eurocopa de 2008. «Recibimos una base muy buena de Luis. Siempre fuimos respetuosos con lo que se había hecho antes, no borramos ninguna huella del pasado», afirma, subrayando la continuidad y el respeto entre generaciones de seleccionadores.
También menciona la dificultad de confeccionar la lista de convocados, dejando fuera a jugadores importantes como Marcos Senna y Raúl, decisiones dolorosas pero necesarias.
«Fue un momento de dolor. Nos encontramos en una situación que no esperábamos»
En este contexto, destaca a Fernando Torres como uno de los jugadores clave que, a pesar de estar en el alambre físicamente junto a Andrés Iniesta, fue incluido en la lista por su importancia y su historial con la selección, especialmente tras su gol decisivo en la final de la Eurocopa 2008.
Un tropiezo inesperado: España 0-1 Suiza
El Mundial comenzó con una derrota sorprendente ante Suiza en el primer partido. Del Bosque describe este momento como un shock para el equipo. «Fue un momento de dolor. Nos encontramos en una situación que no esperábamos», admite.

Sin embargo, tras unos días de reflexión, decidieron mantener su estilo de juego con dos cambios para el siguiente partido: Andrés Iniesta por lesión y David Silva, quien fue sustituido por Fernando Torres en un cambio táctico. También menciona conversaciones con capitanes como Carles Puyol y Xavi Hernández, quienes coincidieron en que el equipo no había jugado mal pese al resultado.
España 2-0 Honduras: recuperando la confianza
La victoria ante Honduras permitió al equipo respirar. Del Bosque recuerda un momento clave en el que, para levantar el ánimo tras la derrota inicial, les dijo a los jugadores: «Si ganamos los próximos seis partidos, seremos campeones del mundo».
Fue un reto que parecía inalcanzable, pero motivador. David Villa marcó los dos goles, comenzando a destacar como el máximo goleador del equipo en el torneo, y Del Bosque lo elogia como «un hombre muy importante» en los 114 partidos de su etapa, al tiempo que destaca que Fernando Torres también tuvo un rol relevante ante los hondureños al entrar en el once titular, aportando su capacidad de desequilibrio y experiencia en momentos de presión.
España 2-1 Chile: clasificación con tensión
El partido contra la Chile de Marcelo Bielsa fue complicado debido al estilo agresivo y los marcajes individuales de la roja sudamericana.
España logró imponerse con un gol otra vez de David Villa y otro de un Andrés Iniesta que a partir de ahí empezó a crecer en confianza de una forma imparable.
Del Bosque destaca la precisión técnica de Villa en un gol a portería vacía desde una posición muy difícil: «Fue increíble, una precisión técnica que no muchos habrían logrado».
En este partido, el técnico salmantino también valora las aportaciones tácticas discutidas con su cuerpo técnico, especialmente con su mano derecha, Toni Grande, con quien compartió observaciones clave durante el encuentro, como el momento en que notaron que Chile parecía conformarse con la derrota 2-1 porque, a pesar de caer, ese marcador clasificaba tanto a chilenos como a una España a la que solo le valía ganar.
Octavos de final: España 1-0 Portugal
En octavos, España se enfrentó a la Portugal liderada por Cristiano Ronaldo, en un partido duro y equilibrado.
«Pudo haber caído de cualquier lado. Tuvimos buenos jugadores, un sistema sólido y esa pizca de suerte que necesitas para ser campeón», reflexiona Del Bosque.
Otra vez David Villa marcó el gol de la victoria, asistido por Xavi Hernández y Andrés Iniesta, pero el seleccionador hace especial mención a la entrada en la segunda parte de Fernando Llorente, cuyos minutos fueron claves: «Nos dio mucho oxígeno. Aunque solo jugó 20 o 30 minutos, fue fundamental para ser campeones».
También habla Del Bosque sobre las dudas que algunos tenían sobre la seguridad de Iker Casillas, ante los efectos del polémico balón oficial, el Jabulani. El técnico, que sabía que también tenía porteros de garantía con Victor Valdés y Pepe Reina, siempre mantuvo su confianza en Iker y el tiempo le dio la razón.
«Siempre habíamos sentido cierta inferioridad, pero lo rompimos en la Eurocopa de 2008 y lo confirmamos aquí»
Cuartos de final: España 1-0 Paraguay
El encuentro contra Paraguay fue incómodo por el estilo agresivo y físico del rival. Del Bosque recuerda un penalti claro cometido por Gerard Piqué que pudo cambiar el rumbo, al igual que el errado en la repetición de Xabi Alonso, pero el equipo mantuvo la calma.
El gol decisivo fue obra, como no, de David Villa, aprovechando el rebote de un tiro al palo de Pedro Rodríguez. «Fue un alivio total, porque meterse en semifinales era un paso enorme», señala.
El partido sirvió además para que todo el mundo empezará a creer en Iker Casillas, que paró el penalty a Óscar Cardozo, con la ayuda del estudioso de los tiros desde los 11 metros Pepe Reina. «Le anticipó su lado de seguridad en el lanzamiento y acertó», cuenta Del Bosque.
Semifinal: España 1-0 Alemania
La semifinal contra Alemania fue un «partidazo», según Del Bosque, que marcó la superación de un viejo complejo frente a los germanos. «Siempre habíamos sentido cierta inferioridad, pero lo rompimos en la Eurocopa de 2008 y lo confirmamos aquí» explica.
El inolvidable gol de Carles Puyol, tras un córner lanzado magistralmente por Xavi Hernández, clasificó a España para la final, pero Del Bosque elogia el trabajo colectivo en esa jugada: David Villa incomodó al portero, mientras Gerard Piqué y Sergio Ramos molestaron a los defensores.
Sobre Puyol, destaca su energía y liderazgo: «Fue un verdadero líder, con un comportamiento impecable».
En este partido, el cuerpo médico, encabezado por los doctores Oscar Celada y Juan Cota, y con el milagroso trabajo de los fisioterapeutas con especial notoriedad de Raúl Martínez y Emili Ricart, jugó un papel crucial. Del Bosque reconoce su importancia al mencionar cómo trabajaron para que jugadores como Iniesta y Puyol estuvieran en condiciones óptimas, especialmente tras las dudas físicas de Puyol antes del encuentro. «Fueron clave para mantener al equipo en forma. Su labor, junto con el aspecto mental que también trabajaron, nos ayudó a crear una piña y un ambiente excepcional», afirma.
La épica final: España 1-0 Países Bajos
La final en el Soccer City contra Países Bajos fue tensa y física. Del Bosque admite que los holandeses adoptaron un enfoque más agresivo de lo esperado: «Nosotros parecíamos los holandeses y ellos otra cosa», al tiempo que recuerda con orgullo y agradecimiento que varios meses después de la final, el seleccionador tulipán, Bert van Marwijk, «tuvo un detalle genial al venir a las instalaciones de Las Rozas casi a disculparse por el comportamiento en la final. No sé si nosotros habríamos hecho eso en iguales circunstancias».
El partido se decidió en la prórroga con el gol histórico de Andrés Iniesta en el minuto 116, tras una jugada en la que participaron los tres cambios que había introducido el seleccionador: Cesc Fábregas, Fernando Torres y Jesús Navas.
«Fue un golpeo difícil, con el empeine, que podía haber ido fuera. Pero Andrés lo hizo con una eficacia y estética tremenda», describe un Del Bosque que contuvo la explosión de júbilo hasta el final para que todos estuvieran concentrados hasta que pitara el árbitro.
Otro de los momentos de la final fue la prodigiosa parada de Iker Casillas a Arjen Robben: «Esa pierna que sacó se recordará eternamente».
Del Bosque no duda en atribuir el éxito a sus jugadores. «Teníamos muy buenos futbolistas. Gente como Iniesta, Xavi, Puyol, Villa, Busquets, Alonso… Pensaban más en el equipo que en ellos mismos», afirma.
Xabi Alonso: un entrenador en el campo
Especial atención merece Xabi Alonso, a quien Del Bosque describe como un «entrenador en el campo» junto a Sergio Busquets.
En cuanto al doble pivote, tan criticado tras la derrota ante Suiza, Del Bosque defiende su decisión de mantenerlos: «Creíamos en esa pareja. Eran el eje de todo: defendían, construían y atacaban. Pensaban más en el equipo que en ellos mismos».
Sobre el nuevo entrenador del Real Madrid, destaca su mentalidad y preparación: «Tiene un carácter vasco de fuerza, con una buena formación. Ha mejorado en todos los sentidos, ha jugado en el extranjero, domina idiomas. Es parte de una generación que ahora está preparada para dirigir cualquier equipo». Estas palabras reflejan no solo el valor de Alonso como jugador, sino su potencial como líder y estratega, algo que hoy vemos materializado en su carrera en los banquillos.
El cuerpo técnico y médico
Además, reconoce la labor de Toni Grande, su segundo entrenador, como una figura esencial en la gestión táctica y emocional del equipo. «Toni fue fundamental. Siempre estaba ahí para discutir decisiones, analizar partidos y mantener el equilibrio. En momentos clave, como en el partido contra Chile, sus observaciones fueron muy valiosas», señala Del Bosque.
El cuerpo médico y los fisioterapeutas también reciben un merecido homenaje por su contribución al éxito. Del Bosque subraya su importancia no solo en la recuperación física de los jugadores, sino también en el mantenimiento de un ambiente positivo. «Todo el cuerpo médico fue vital. Su trabajo permitió que jugadores clave como Iniesta estuvieran listos para momentos decisivos. Además, ayudaron con el aspecto mental, creando un entorno de unión que fue tan importante como el juego en el campo», explica.
Un legado para el fútbol español
Quince años después, Del Bosque sigue siendo un referente por su liderazgo sereno y sus logros. Al mirar al futuro, se muestra optimista: «Ahora tenemos otra generación, otro estilo. No hay una receta única para ganar. Lo importante es adaptarse a los jugadores que tienes».
Antes de despedirse, expresa su deseo de ver a España la segunda estrella en su camiseta: «Luis de la Fuente está bendecido. Ojalá el año que viene este Museo tenga su segunda Copa del Mundo».